Con solo un gesto una sonrisa, con solo una
mirada que vio la brisa. Con
la rima aprendí que con el tacto de tus manos me perdí. ¿Y qué más da? Todo es
efímero, nada es sincero.
Me vuelvo loca cuando veo tu boca, cuando
ya nada más importa. Cuando de un piso creamos un paraíso. Improviso palabras,
quizá no las entiendas, quizá ya ni vuelvas. Bonito, ¿no? Qué lastima que quedó en el olvido. Ya me
cansé de ti, de tus palabras vacías, de este sin vivir. Las palabras se las
lleva el viento, testigo de lo que siento. Este silencio marca un adiós, un
hasta siempre sentencio.
Bienvenida al olvido, a ese lugar del que
nadie sale vivo.
Quiero que entiendas que no es por ti, ni
es por mi sino por nuestra mierda. Que ni con mil besos se arregla.
Todo destrozado, todo evaporado, y nada queda. Tarde o temprano el final llega.